22 de diciembre de 2022

Nacer a uno mismo

 Hace días leí una frase del escritor Jorge Luis Borges que decía “uno está enamorado cuando ve en el otro a un ser único”. ¿Único de especial? ¿Único de unicidad?

 Si tienes dos o tres talleres de desarrollo humano encima, unos cuántos libros, consumiste videos e hiciste al menos 3 horas de terapias; sabes que la mente nos juega una trampa, y que todo lo que veo y reconozco fuera de mí, para expansión o contracción, ante todo primero vive en mí.

Así que, comprendo que el señor Luis, hablaba de la conciencia de unicidad. El enamoramiento como puente al contacto con uno mismo. Cuando estamos enamoramos vemos en el otro al reflejo del UNO. 

Por eso dicen las malas lenguas, que Jesús reprobó matemáticas, porque insistía en que 1+1= 1 y ni su ego, podía hacerle cambiar de opinión. 

Entonces, pienso, previa existencia que cada vez que amamos a otros lo hacemos desde el amor que está en nosotros y eso explica el carácter tan maravilloso del amor,  podemos amar independientemente de cómo se comporte el otro, de cómo sea, haga o deshaga. Lo que NO confirma que nos quedemos en espacios de toxicidad. Sólo ama a la distancia. 

En vísperas de navidad, podríamos aprovechar el impulso del nacimiento para revivirnos en nosotros mismos y aceptar que somos un tesoro escondido en nuestro cuerpo humano, una piedra valiosa que en sí misma tiene un valor incalculable, incluso cuando nadie pueda reconocerla. Porque lo que eres no brilla a luz de otros, sino a instancia de ti mismo


0 comentarios:

Publicar un comentario

¡Un blog se nutre de comentarios, deja tu huella, muchas gracias por compartir!