21 de agosto de 2010

La Ira

Todos somos humanos, aunque a veces pretendamos categorizar otra instancia y para ello solemos colocarnos la careta del "bienestar enarbolado por la constante sonrisa", más sin embargo, sabemos por experiencia, que estar "sonriente" todo el día o toda la vida; es una gran pretensión; las emociones se disparan frente a los hechos sin pedir permiso; y si bien hemos logrado por nuestro trabajo personal, "rediseñar nuestras formas de reacción" siempre estamos igualmente expuestos a sentir enojo, frustración, irritación, rabia, bronca, desilusión. Es decir, cuando los hechos no se ensamblan a nuestras creencias nos desanimamos, la energía se corta, se obstaculiza, se amontona y surge el enojo. El enojo es una emoción natural humana, que no debería ser temida.
Mientras que el enojo se relaciona con un evento que se trunca, la ira - hermana mayor- es resultado de un deseo insatisfecho acerca de cómo son las cosas; se pone en tela de juicio al mundo, sus reglas y a las demás personas; puesto que deberían ser distintos.
La ira es un estado constante, es la sensación de injusticia que pesa sobre el que la promueve. Inmoviliza, impide el crecimiento personal, y nos coloca en la postura del dedo acusador y la verdad absoluta. Quién manifiesta la ira como un estado de ánimo permanente, observa toda la vida desde el cristal de esa emoción, desde la insatisfacción, la carencia, la necesidad, la frustración, el resentimiento. Es la espera vana, la que nada de lo que espera llegará, porque desde la esperanza inculcada en el futuro, se deposita la semilla de la imposibilidad material de cambio. El tango me recuerda un poco a este pensamiento - "El mundo fue y será una porquería" (Cambalache)
Un individuo que convive con Ira, es aquél que ha aprendido de ella, una herramienta para descargar todos sus fracasos y hacer de los que lo rodean, los chivos expiatorios de sus asuntos irresueltos, usar la manipulación como fuente de logros, obtener "amor o reconocimiento" que por otro medio no se cree "posible lograr", conseguir la "atención" de los demás y excusa de los resultados no deseados por la pérdida del auto-control.
Se presenta a través de la agresión verbal-física, con la humillación o ridiculización de otros que son considerados "menos"; con gritos o explosiones incontrolables; insultos, sarcasmos, victimización.
¿Qué le sucede internamente a quién padece de ira? La ira es una emoción "tóxica" porque está mal dirigida, y por lo tanto intoxica a quién la manifiesta. Si tú estás enojada con tu pareja y sobre ella descargas tu enojo, esa emoción está bien dirigida. El problema se genera cuando reprimimos lo que sentimos, negamos su existencia; es como si en tu mente una voz te dice -está mal que estés enojada con tu pareja- y a partir de ahí, en lugar de canalizar el enojo, lo absorbes, lo "controlas", lo guardas en tu cuerpo. Aunque no lo expreses, existe. Si con el tiempo las situaciones se repiten, y cada día comienza un ciclo de reclamos, frustraciones, deseos insatisfechos en tu mundo interior, pones en marcha el proceso de la ira. Y ahora, esa energía mal dirigida se expande al mundo desde ti.
La ira nace de la auto-exigencia enfocada a uno y a los demás; muchas veces idealizar el mundo y a las personas, nos provoca desilusión, expectativas frustradas; "los otros no son como quieres que sean" y frente a eso "reaccionas"; cuando no puedes "entender" eso, cultivas resentimiento.
Para alejarte de este proceso deberás comenzar a AMARTE, a ACEPTARTE y ACEPTAR; a utilizar lo que consideras "decepcionante" como aprendizaje para transformarte y crecer.

                                                                                                     Chuchi





11 de agosto de 2010

Preguntas Impostergables

Ella se levantó de la cama mucho antes de que irrumpiera con su habitual abuso la sonaja alterada de su despertador. Se dirigió a la cocina, acomodando el pijama arrugado, martirizado por el enredo de las sábanas y las vueltas nocturnas. Sirvió agua en un vaso y tragó desesperada para calmar la sed. Abrió el refrigerador y manoteó un pedazo de queso fresco. Luego encendió la estufa y calentó café de la noche anterior. Miró por la ventana. Miró sin mirar. Se sentó en el sofá sin hacer nada durante treinta minutos. Sonó la alarma. Él se levantó y dijo: Buen día. Ella dijo: buen día, - aunque en realidad quería decir ¿De quién es el labial prendido en el cuello de tu camisa?
Hay momentos en nuestras vidas que vivimos postergándolos, empujándolos hacia otros tiempos, creyendo que por no vivenciarlos, no existen pero sin embargo ahí están.
Son preguntas impostergables, en el sentido de que no deberían permitirse hacerse a un lado, sino que por el contrario, deberían enunciarse y confrontar las respuestas.
La preguntas que no hacemos en general son las respuestas que no queremos escuchar. Y por eso sucumbimos a situaciones ajenas a nuestra escala de valores; nos colocamos en roles funcionales obsoletos para seguir “aunque sea” recibiendo algo de lo que anhelamos.
En lugar de salir al ruedo y crear en nuestro contexto lo que deseamos “elegimos” quedarnos detrás de las bambalinas Nos embarcamos en relaciones amorosas, y profesionales, insatisfactorias, en actividades cotidianas que nos generan displacer, y sobrevivimos al ritmo vertiginoso de los días como sonámbulos, arrastrando nuestras alas por el fango, y nuestros sueños por el polvo de las cenizas de los sueños muertos de otros.
Y dentro de nuestros corazones, el eco de la pregunta, simple, y sencilla, se hace escuchar ¿Para qué? ¿Para qué lo hacemos? ¿Para qué elegimos ese modus operandi de seguir? ¿Para qué nos traicionamos? ¿Para qué boicoteamos nuestra libertad?
Frente al espejo modulamos las respuestas exactas, tajantes, sinceras pero ante al mundo obeso e indiferente, sonreímos crédulos de una inocencia que sabemos ajena; ¿no sé para qué lo hago?
¿No sabes? ¿Realmente no lo sabes? ¿A quién más quieres venderle ese cuento ingenuo?
La mayoría de nosotros “soportamos” a diario una serie de patrañas y, ¿cuáles son?
-Enojo,
-Fastidio,
-Resistencia,
-Angustia,
-Flojera,
-Ira,
-Impotencia,
-Frustración,
-Coraje,
-Miedos,
-Expectativas frustradas
-Etc… ¡las que imagines!
La lista podría ser interminable… pero volvemos a la pregunta impostergable ¿Para qué lo hacemos? ¿Para qué sigues en ese trabajo que no te satisface? ¿Para qué vives con la incertidumbre de si tu pareja te ama o dejo de hacerlo? ¿Para qué siempre te prestas a lavar todos los trastes en las comidas familiares? ¿Para qué sigues siendo la burla de tus compañeros? ¿Para qué postergas la dieta? ¿Para qué insistes con hacer lo que los demás te dicen en lugar de escuchar tu voz interna? ¿PARA QUÉ?
¿Ya lo has pensado?, te doy la respuesta: Para obtener a cambio RECOMPENSAS OCULTAS.
Sí, aunque te suene patético, así nos comportamos. En lugar de salir al ruedo y crear en nuestro contexto lo que deseamos; influenciados por nuestras creencias limitantes, “elegimos” quedarnos detrás de las bambalinas.
Si es cierto, “elegimos”, nadie nos obliga “a estar dónde no queremos”, aunque a veces creamos que no tenemos opción, siempre existe, tal vez no sean opciones habilitadas para mí pero existen. TodoRecuerda que todos los días a cada momento ¡TU ELIGES como quieres vivir la vida! lo que “aguantamos” (leerlo como si tuvieras una pila de libros sobre tu cabeza) lo elegimos porque “hoy” es la mejor “opción que vemos para nosotros”.
Te voy a dar un ejemplo para que me entiendas, “si yo siento fastidio de ir a trabajar porque no gano lo suficiente, mi jefe me trata mal, y cada vez que suena el despertador protesto, insulto hacia mis adentros, pero igual voy a trabajar…” ¿Qué obtengo? Además de intoxicarme con las hormonas del estrés; recibo la compensación de tener un salario, “cierta seguridad, y libertad para hacer algunas cosas, me siento productiva, etc.”… podría renunciar pero pienso:” la vida está difícil, mi trabajo no es lo mejor pero al menos tengo”, sin embargo el renunciar si es una opción sólo que no la acepto para mí.
Entonces lo que vengo a decir es que “hoy estamos donde queremos” si podríamos estar en otro lugar mejor, ya lo habríamos hecho.
Aunque la situación sea dolorosa, extrema, complicada, es nuestra elección. Que no depende de una conspiración universal, es nuestra ELECCIÓN, a cada momento ELEGIMOS, elegimos cómo sentirnos, cómo reaccionar, qué decir y qué no decir. Y por cada elección que tomamos pagamos precios.
Recuerdo que alguien dijo: Una porción de pastel, es un instante de placer, y meses de estacionarse en las caderas.
¿Comprendes?
Si empezamos a “darnos cuenta”, que seguir con ese vínculo que nos trae más tristeza que alegría es quizás por “miedo a estar sola”, “miedo a fracasar”, “miedo a volver a empezar”, o que siempre queremos ser la anfitriona, la mejor en todas las áreas para alcanzar “aprobación”, “sentirnos queridas”, “ aceptadas”; que muchas veces nos callamos la boca para “pasar desapercibidas”, “para no correr riesgos”, “para obtener reconocimiento”, entonces las preguntas impostergables comenzarían a tener algo de voz en tu mente.
Las nubes se disiparían, empezarías a ver que hay sol, que existen otros medios para alcanzar la compañía, el amor, el reconocimiento, los sueños, el éxito; que no es necesario (en el sentido de natural) prestarnos a jugar un juego de victima emocional.
Recuerda que todos los días a cada momento ¡TU ELIGES como quieres vivir la vida! (aun cuando elijas no creerme)
                                                                                                   Chuchi

3 de agosto de 2010

La muerte de mi papá

El 4 de agosto de 2010, se cumple un mes de la muerte de papá. Mi papá, un hombre como otro cualquiera, que no tendría que haber muerto, según mi corazón. A partir de su partida me he quedado con muchas preguntas sin respuestas; pues su voz ya no podrá contestar a mis interrogantes y una canción -escrita por mí- que desde mediados del año comencé y pensaba regarlársela para la navidad. Desde entonces la vida, mi vida, es un eclipse de sol; me he quedo en las sombras, una parte de mí - mutilada- y otra, que arrastra y cual equilibrista, maneja los días que quedan por venir con una sonrisa, que es el disfraz de unas cuantas lágrimas.
Hace un mes, que aprendí a contar los días; es casi paradójico, las cosas que uno puede aprender en cualquier circunstancia. Hoy sé contar uno, dos, tres, cuatro, diez, quince días desde que se fue; y también sé, semana una, semana dos. Y hasta ya calculo que para mí próximo cumpleaños, no habrá pasado más que once meses con veinte días.
Descubrí también, que uno nunca sabe a ciencia cierta cuál es la última vez de las cosas; y sin embargo, se juega la vida, "actuando sus emociones, dires y diretes" como si existiera el control de todo lo que hace. Aquella vez que lo abracé por última vez, hace más de un año y seis meses, sería la última, determinante y para siempre; era la despedida no de mi regreso, sino de su partida. Y ahí me quedo todas las noches antes de dormir, recordando las últimas veces de tantas situaciones que jamás siquiera sospeché, serían las últimas. No sé cuándo fue el final de una tradición de pedir permisos, despertar en familia, y almorzar todos juntos en medio de peleas cotidianas los domingos; ni que aquél beso de mi amor de turno se convertiría en la estampa repetida del final; ni que esos ojos perversos conjurarían sus miedos sobre mi lealtad.
Me quedó grabado, aquello de que "nunca hay que irse de un portazo", dejando pendientes, broncas tácitas, dolores mal heridos, egos ofendidos, miedos endiablados. Que cada día convive con la posibilidad de "hoy es la última función" y por eso debemos "gozarlo" aún con la penas y exige de nosotros el máximo esfuerzo. Y en el no postergar también se implican nuestras emociones, la capacidad de poder decir lo que nos ocurre sin rodeos, sin la fantasía de que el otro adivine o se entere por cualquier medio ajeno a la voz nuestro corazón.
La muerte de mi papá me recalcó con letras de pancartas y brillantinas que siempre es sanador decir lo que anida en nuestras almas. Pese a la distancia y a la enfermedad; nosotros pudimos construir un puente en el que casi a diario, viajaban los "te quiero" sin visa ni documentos.
Papá tenía el sueño de vivir 105 años, y apenas la batería le duró para sesenta y tantos; y su intempestivo derrumbe me dejó como moraleja que la vida es un pequeño espacio para jugar a convertir realidad nuestros sueños; apenas una obra de teatro independiente, de pocos actos, en dónde los sueños hablan de nosotros mismos, más que nuestras voces; y que después, todo será en vano. Los sueños son los deseos que a veces ignoramos, escondemos, evitamos y nos aterran; porque siempre, como todo en nuestra existencia, nos obligan a que nos conectemos con nuestro mundo íntimo y personal, busquemos entre los escombros del ser, y rescatemos lo que no usamos; esa materia despojada y olvidada, es la tela de nuestra realización.
Su ausencia me desgarra la razón, los sentidos, los sentimientos; y aún de todos modos, me impulsa a seguir rumbo a la cima de mi colina, a sabiendas que en mi sangre, corre la suya, que soy gracias a él.
                                                                                                                 La Negrita




29 de julio de 2010

Todo entra por la Nariz

Navegando a la deriva, me encontré con las famosas feromonas, en diversas web se ofrecen como golfas poderosas que pueden anclarnos en el amor, y los negocios. He leído que tres gotas por aquí y tres gotas por allá, pueden transformarme en una verdadera atracción para los hombres y para los potenciales clientes de mi empresa. Puedo ser una mujer altamente deseada en el terreno sexual y en el profesional. Si me atrevo a comprarlas, cambiará mi vida para siempre. Seré la mujer maravilla con citas por doquier, varones a mis pies, clientes aclamando por mis servicios, y billetes nuevecitos anidando en mi billetera. ¡Qué hermosa tentación! Más sin embargo, mi incredulidad se activa al 100%, es cierto, la edad me ha vuelta más bruja y desconfianza, y cuando la limosna es grande, siempre desconfío.

Pienso, si esto de las feromonas es tan real como lo plantean, estamos en peligro. Ya dejaremos de ser elegido por quienes somos, y empezaremos a serlo por como “olemos sin oler,” o ¿acaso ya no nos elegimos por ese factor? ¿Tendrá valor el ser o sólo el sudor?, aunque también por otra parte es un buen argumento para mis elecciones (Chiste interno); desde 1986 se conoce que los seres humano arrojamos al exterior estas sustancias químicas como señales de que "acá estamos, ven hacia a mí" a través de la transpiración y quedan flotando en el aire, la única misión es afectar nuestro mundo sexual y atraer al sexo opuesto; son captadas por el órgano vomeronasal (OVN), alojado a 6 cm hacia dentro de nuestra nariz, llamado sexto sentido. Tal vez esto explica porque algunos poseen un atractivo sexual mayor a otras personas. Pero si te pasa como a mí que dado mis resultados amorosos, segrego pocas feromonas, no desesperéis amiga podemos rociarnos feromonas sintéticas.

Parece ser que la culturalización nos ha arrebatado entre otras cosas esta divina excreción, tanto baño, tanta higiene, perfumes, cremas, aceites, más cremas; hacen que perdamos o ocultemos nuestro "olor natural".¿Dejaremos de asearnos para conseguir más citas? Otra manera de ocultarnos es a través de la ropa, así que si quieres intervenir en tu designio cruel del amor, empieza a acostumbrarte a llevar menos telas pegadas a tu piel.

Sigo pensando, si con la edad avanzando se pierden tantas cosas, entre ellas hormonas, feromonas, apetito sexual, atracción, ¿ Qué nos queda para vincularnos desde lo afectivo? La feromonas no sólo alientan al encuentro carnal, sino a la producción del afecto. Quienes han utilizado "feromonas sintéticas" han reportado mayores detalles románticos por parte de sus parejas.

Entonces, ¿ El amor deja de ser algo mágico y majestuoso, para convertirse en una propuesta inconscientemente química? ¿ Lo que nos atrae del otro es su aroma que llega como una invitación indecorosa a nuestro órgano vomeronasal?

El amor deja de ser a "primera vista" para ser a ¿Primer olfato? ¿Qué tendrán tus feromonas que no tienen las mías? Las de ella que supo conquistarte ¿Cómo serán? y ¿Cuando nos resfriamos nos dejamos de atraer?

Revolucionados por los aromas del mundo, hombres y mujeres, se conocen, conquistan o repelen; la apariencia física juega un papel importante, pero más aún " la química que soltamos naturalmente" y que ingenuamente ignoramos que nos envuelve con un halo de pasión y seducción.

Ya convencida del fenómeno, empecé a entender porque a veces una pasa de la euforia al aburrimiento sin que medie ningún hecho particular en el medio; tal vez "ese aroma que nos trajo se evaporó" y el vínculo construido no fue un lazo suficientemente fuerte como para seguir existiendo por compromiso cultural.

Más sin embargo, y luego de ver los precios de los cosméticos cientifícos, me aboqué a la tarea de encontrar algunos ejercicios o recetas de la abuela para producir al 100% estas sustancias.

Los expertos indican que:

a) Hay que tener sexo una vez por semana, de esta forma se contribuye a la producción de feromonas.

b) Realizar ejercicio ayuda a estimular las glándulas apócrinas, el sudor aumenta la producción de los químicos amorosos.

c) No usar desodorantes con aromas fuertes. Usar inodoros.

d) No eliminar el sudor fresco del cuerpo, el mal olor por lo general aparece 24 horas después.

Con todos estos consejos y la ayuda de la ciencia, la soledad es para quienes no quieren gastar energías. Yo por lo pronto me voy a dar unas vueltas corriendo al parque, bien abrigada para sudar mejor.

27 de julio de 2010

¿Dónde estás amor de mi vida?
























"Puedo escribir los versos más tristes de mis noches,
   decir por ejemplo, "la noche está endiablada,
   y gruñen de enojo los ángeles, a lo lejos"
   El viento de la noche me ensordece y clama.
  Yo lo quería, y él a veces también me quería
 en días como este lo tuve entre mis piernas...
 y lo bese tantas veces bajo su cruel indulgencia...
 mi alma no se entristece por haberlo perdido,
 sino por nunca haberlo encontrado...
y el verso cae al vacío, como la soledad
que me abraza, consolando..."

¿Dónde carajos estás Amor de mi vida? Te preguntas, me pregunto, nos preguntamos. ¿Será acaso que el Amor rococó rosado, ese que envuelve con su flama incandescente, y rocía néctar de miel a las almas de quienes lo conquistan, es privilegio de algunos pocos? ¿Será que de todo lo vivido seamos meros mensajeros de un algo que creemos que existe pero no encontramos?
Y otra vez más, ¿Quién sigue?, Adelante, nos presentamos, nos ilusionamos, nos proyectamos en miles de fantasías, y al final; el mismo final. Y cómo diría Joaquín Sabina "cada vez son más tristes las canciones de amor" o ¿Somos más tristes nosotros con tanta frustración acuesta?
Hace días le dije a una amiga: "Quiero sentir  mariposas en el estómago" y ella pícara e incrédula me dijo: "Pintarrajéalas en tu vientre".
De repente siento que no siento como antes, que nada me resulta enardecedor y todo es pasajero. Me encuentro vociferando a los gritos el paradero de lo que no  sé si existe para mí o ya pasó y por estar distraída no me di cuenta  que se había anidado en mi estación.
La búsqueda del amor es la mas ansiada por la humanidad, una reciente encuesta de la fundación de Estados Unidos, Lost of Love Foundation revela que el 45% de las personas entre 30 y 60 años de edad, se encuentran abiertos a la encauzada travesía de encontrar al Amor de sus vidas, como parte de su meta de realización personal. Pero ¿ Qué es lo que buscan? o mejor dicho ¿Qué es lo que pretenden encontrar? ¿Qué es el amro y que implica de "mi vida"? Acaso, ¿Todos los amores de los que hemos sido partícipes no son de nuestras vidas?.
Una de las creencias más tediosas en relación al amor es la idea de ÚNICO APARICIÓN y ETERNO, y si no cumple con estos requisitos, lo desechamos.
Tal vez, si fuésemos menos exigentes y empezáramos a valorar más a nuestros vínculos, podríamos descubrir con mucha alegría que todos los seres que se han cruzado en nuestro camino forman parte de nosotros mismos, puesto que como seres dialógicos todas las relaciones pasadas, presentes y las que tendremos dejan su impronta en nuestros ser.
El amor es la energía que nos mantiene cada día con miras a un mañana, aunque nos duela el alma, estemos desilusionados, y pensemos que no hay más nada que hacer.
El amor que buscamos, ese que juega a las escondidilllas con nosotros, que oímos susurrar en la quietud de nuestros sueños, viven en nuestros corazones. Queda esperar quién quiera compartir todo este caudal. Somos la posada de esa fuerza vital, los pinceles que cada día pueden pintar azul nuestro infinito cielo de posibilidades.
                                                        Chuchi

20 de julio de 2010

Día del Amigo

















Hoy, 20 de Julio, se celebra en Argentina, el Día del Amigo; es una fecha especial, pues todo el país se detiene y hombres, mujeres, niños, adolescentes, ancianos se reúnen con sus amigos a celebrar el vínculo que los une. Es que para los argentinos que hemos nació mamando el tango y chupando el mate amargo; la amistad es un sentimiento que se nos ancla fuerte en el alma. Es ese barco que orillado en nuestras costas soporta soberbio toda tormenta, los distintos mapas de la vida, las mareas, la sequía, y el tiempo. Un amigo en argentina es alguien con el que has pasado la vida caminando junto, o de vez en tanto te encuentras; pero ese amigo se abierto contigo como una puerta sagrada, y tú con él, y ambos ingresaron al templo sacro de la amistad. El amigo es el que conoce tus secretos más íntimos, tus miedos, tus locuras, tus tristezas, tus travesuras, tus promesas, tu amores y tus desencuentros, es el que peina y maquilla tu soledad para que te sientas mejor; es el que te alcanza una toalla para quitarte el sudor que el esfuerzo por vivir te genera, es el que te alienta a que te arriesgues a todo o nada a ese sueño, es el que te despierta de las pesadillas, y llora contigo tu dolores. Un amigo es el que se te queda tatuado para siempre en el alma, y a pesar de la distancia, el tiempo, la corrupción, la contaminación, y el desaliento, cuando lo vuelves a ver, le sonríes y lo abrazas como si nunca hubiera pasado el calendario por las sienes blancas de la cabellera.

Los amigos son ángeles que te cuidan, que te aman, que te alientan, que te impulsan, y sobre todo, "No te compran las historias que te cuentas para dejar de hacer, recaer en algo que te hace mal, o naufragar en la pena insoslayable de las pérdidas". Son tesoros que habitan en nuestro mundo, y los llenan de recuerdos, te forman en la persona que eres, porque todas las relaciones que tenemos nos dejan huellas, y hacen que cada día al abrir los ojos, aunque hayan miles de telarañas que te tiran a seguir durmiendo, elijas inspirar, sonreír, y mirar para adelante. Yo tengo la fortuna de tenerlos como satélites en mi cielo, algunos son estrellas muy lejanas, otros estrellas más cercanas, pero ninguna estrella fugaz.

Yo los miro desde lo que fuimos y les agradezco el espacio de corazón que lleva mi nombre; porqué sé de memoria el amor que me tienen; es una fuerza cálida e intensa que me recorre por las venas cuando tan sólo evoco sus nombres. Mis amigos saben de mí como yo sé de ellos. Nos hemos visto crecer, madurar, envejecer y aún procuramos proyectos para el futuro. Mis amigos son Luciérnagas que iluminan mis más oscuros momentos, y cuando uno llega a la oscuridad absoluta, se da cuenta de que los otros habían sido solos instantes de apagones. Hoy desde mi absoluta oscuridad los abrazo y beso en el corazón, Feliz Día Amigos!!

Pd: Este Post está escrito sin editar, disculpen si hay errores.

Chuchi

14 de julio de 2010

Teta Mala vs Teta Buena






















Basta. Hoy me declaro “aburrida” de ser la metáfora viviente en dónde algunos conjuran sus miedos. ¿Te ha pasado? ¿Cuántas veces? Seguramente muchas. Es que hay tantos “locos” sueltos proyectando sus carencias por las aceras de los demás, que deberían tener un sello de agua que los identifique. Dicen luego, “Las relaciones humanas son complicadas,” ¿Lo crees? , por supuesto que no, los hombres – en el sentido de la especie- hemos sido congraciados con el don del peculiar lenguaje que se nos ha legado- un lenguaje reflexivo, que nos permite ser objetos de nuestra propia experiencia-, sin embargo; muchos no han superado los traumas iniciales de la vida; los que han comenzado desde el trauma del nacimiento; la bofetada príncipe que nos despierta de un mundo cálido y acuoso a otro menos cálido e igual de acuoso –camino de lágrimas-. En los primeros meses de vida, realmente somos dependientes; luego crecemos y algunos maduramos y nos volvemos inter-dependientes; lo cual implica sabernos parte del todo, y como diría el Buda: “Si no puedes ayudar, al menos no hagas daño”, más otros; -muchos- los que prefieren invertir sus monedas en viajes, cosméticos, autos, ropa, perfumes, videos juegos, en lugar de una terapia de transformación personal; esos que experimentan SER a través del TENER; esos son los que se quedan anclados en alguna de los traumas de la niñez, y nos salpican. Desde la perspectiva psicoanalítica de Melaine Klein, el desarrollo personal se piensa como el florecimiento de la personalidad que supera las etapas tempranas de la niñez – que pueden volver en la vida adulta-y alcanza un equilibrio entre el mundo psíquico interno y el externo – imagen privada en congruencia con la imagen pública-desarrollando la capacidad de “dis-frute” de las cosas y el éxito en las relaciones gratificantes de amor consigo mismo y los demás.

De los estadios tempranos, Klein resalta la importancia de dos: la posición esquizo-paranoide que se desarrolla durante los primeros meses de nacidos – 3 a 4 meses- por la lucha que se produce entre los instintos de vida y muerte y el sentimiento de ansiedad persecutoria que se produce en el niño; lo que genera basto miedo, que será proyectado hacia el primer objeto de relación que posee –LA TETA MATERNA que pasa a ser TETA MALA y TETA BUENA. (Proceso de escinción). Esta proyección e introyección colaboran a disminuir la ansiedad persecutoria del niño; se ampara en la teta buena, pero tiene miedo de ser destruído por la teta mala y persiste el temor a la aniquilación del YO. A partir de los 4 a 6 meses de edad, la madre no es vista como escindida, sino que se la ve como un objeto total; pasando a la posición depresiva, dado que el infante siente culpa, dado que el objeto amado - madre- primariamente fue agradedio (Teta Mala-posición esquizo-paranoide).
"El sentimiento de que el daño hecho al objeto amado tiene por causa los impulsos agresivos del sujeto, es para mí la esencia de la culpa. El impulso a anular o reparar este daño proviene de sentir que el sujeto mismo lo ha causado, o sea, de la culpa. Por consiguiente, la tendencia reparatoria puede ser considerada como consecuencia del sentimiento de culpa". (Klein, 1988. 45pp).
"Posición alcanzada en su esquema de cosas por el bebé (o por el paciente en análisis) cuando advierte que tanto su amor como su odio están dirigidos hacia el mismo objeto -la madre-, tiene conciencia de su ambivalencia y se interesa por protegerla de su odio y para llevar a cabo la reparación por el daño que ha causado su odio. Como el sistema de Klein incluye el instinto de muerte y hostilidad innata hacia la madre y la envidia de ella, se concibe que esta crisis desempeña un papel esencial en el desarrollo de cada bebé, al margen de la cualidad de los cuidados maternales, y su resultado, según se sostiene, determina todo el desarrollo posterior. Se considera que las personas saludables y neuróticas han pasado por la posición depresiva, que las personas con problemas depresivos están fijado en ella y que las personas con problemas esquizoides y paranoides no han logrado alcanzarla"
                                                          Chuchi

12 de julio de 2010

Síndrome de la Super Mujer

"Cómo ha pasado el tiempo, parece que fue ayer..." José Luis Perales canta, nostálgico recordando un pasado que tal vez fue mejor- yo no lo sé, lo único que sé es que "fue", que ya no "existe"-. Un atrás en dónde las mujeres tenían como meta indiscutible de vida, "econtrar ¿?- no ser ENCONTRADAS- un buen hombre y llegar al matrimonio y constituir una "maravillosa familia" como la familia Ingalls y punto. Ahora en cambio, al coincidir con el "príncipe azul"- que cada día es más difícil de hallar, y cientificamente se ha comprobado que es más fácil acertar con los números del Melate (Quini 6) o cómo se llame en España(*), aunque yo no he dado con ninguna opción- se le suma el ahnelo por logros profesionales, el desarrollo de los hobbies, el éxito en las relaciones con los hijos, los viajes espirituales, los cafecitos con las amigas, las dietas que todos los días cambian de nombre, la lucha insondable contra la celulitis,la lectura de libros de autoayuda, las mascarillas para disimular ojeras, el ejercicio, la casa aseada, y la sonrisa intacta a la hora de la cena!. El mensaje social es "las mujeres lo podemos TODO" y "no nos despeinamos si quiera".Sin embargo este mandato social ya se convirtió en algo patólogico "cuando pretendemos hacer todo de una vez, y que nos salga perfecto".El estrés que incorporamos a nuestra vida, repercute primariamente en nuestra biología, y pasamos de forma casi enloquecedora  de "la euforia más alta a la depresión más aguda". La psicóloga del Departamento de Familia del UC Davis Medical Center de Estados Unidos, Sue Barton define a las "SUPER-WOMAN" como personas a las que les cuesta delegar responsabilidades, tienen altos standards, desean que las cosas sean hechas a su manera, y cuando otros hacer el trabajo se irritan con falicidad o decepcionan porque ellas podrían haberlo hecho mucho mejor.
 Es decir están íntimamentes vínculadas con la falacia del CONTROL y la pretensión de ser "buenas" todo el tiempo en distintas áreas para ser aprobadas: Buenas profesionistas, buenas madres, buenas esposas, buenas amigas, buenas hijas, etc. Este síndrome también se vincula con transtornos alimenticios como la bulimia y la anorexia, puesto que para ser exitosas "además las mujeres deben ser esbeltas, sensuales y joviales".
Los elementos que contribuyen a la construcción de este ícono social son varios, entre ellos quiero resaltar:
a)Los medios de comunicación: que nos venden exitosas ejecutivas, impecables, que a la vez tienen hijos perfectos, maridos soñados,  y son reconocidas por sus pares y la sociedad.
b)Las mujeres han sido socializadas para ser agradables: desde pequeñas se les enseña que deben hacer sentir bien a los demás, aún postergando sus propias necesidades. Por esto surge la culpa de no poder dedicar mayor tiempo, y fuerzas al cuidado de los hijos y marido; cuando la mujer se desarrolla profesionalmente.
c)La carreras profesionales siguen basadas en pautas de un modelo masculino,que implica competir, dedicar varias horas semanales a los proyectos, conseguir cierta reputación, etc; situaciones que no combinar con los otros roles adjudicados para la mujer.
La mujer maravilla, dedica  su máximo esfuerzo en pos de construir un mundo mejor, empezando por su hogar; sin embargo, tanta presión comienza a jugarle encontrar.
 Además de los precios físicos que debe pagar, también están los emocionales, su súbitos ataques de histeria, de sensación de fracaso, frustración, elevan sus niveles de cortisol, y se tornan más angustiadas, iracundas, y estallan con facilidad. Así los hijos se comienzan a alejar de la madre maravilla, la madre que siempre tiene todas las respuestas a todas las preguntas, aún a las no formuladas; y los maridos se escapan de la casa, a disfrutar del ocio, pues tienen por seguro que la esposa maravilla lo resolverá todo sin necesidad de su apoyo.
Al cabo de algunas funciones extras; cae el telón; y la mujer maravilla o la super mujer queda sola y se pregunta ¿Por qué?, simplemente porque ha saturado los roles propios y ajenos, ha intentado con grandes aspiraciones humanísticas que todos estén bien, pero los ha afixiado, y arrebatado la posibilidad de cada quién a equivocarse y aprender.
¿Cómo estirpar el síndrome? saca el pie del acelerador, y RECONOCETE como humana, como alguien que tiene mucho para dar, pero que a veces no puede con todo sola; es necesario que empieces a conectarte con la posibilidad de decir "con esto yo sola no puedo", reconocer tus límites y aprender a PEDIR apoyo.
Saber "pedir" te colocará más cerca de tus" resultados", pues habla de tu capacidad de declararte "no suficiente" para encarar determinadas cosas de la vida, y eso te hace verdaderamente PODEROSA.
Rescata tu alegría de vivir y tu salud, borra los estigmas con los que has tratado de convivir hasta el día de hoy, y quítate tu antifaz, descubrete como una mujer maravillosa en lugar de una mujer maravilla.
(*) lo digo de varias formas para que todos mis amigos lo entiendan

                                                                                             Chuchi


,