15 de diciembre de 2022

Cuando el amor… truena

Últimamente parece que el amor dura menos que antes. En el ayer los matrimonios duraban años, décadas, hasta que la muerte física finalmente los separaba. Pero hoy ¿qué sucede?

¿Por qué las relaciones tienen una fecha de caducidad casi inmediata? ¿Por qué dura más una lata de atún que mi reciente intento de noviazgo? ¿Qué anda mal? ¿Será cierto eso de que el tiempo va más de prisa? ¿Qué los días tienen menos de veinticuatro horas? Y ¿Los años menos de trescientos sesenta y cinco días? ¿Atribuyo finales a los repetidos cambios climáticos y de la estratósfera?

Si mi bisabuela, italiana,alegre, decía allá por el 76 “a los hombres no hay que contarles todo” me pregunto ahora ¿esa sería la clave del éxito? 

Por donde miro, siempre hay romances truncos, como las carreras. Y miro siempre por acá, por allá, pero las más veces por acá, bien cerca de mí, y reflexiono, ¿Qué sucede con la vitalidad del amor que vive lo que una mariposa? Yo siento que el amor está en crisis. Quiero decir, los seres humanos en relación al amor de pareja. O tal vez hilando más fino, las mujeres – nosotras – en relación al príncipe azul. Por supuesto que lo de príncipe si es cinismo; por fortuna cada vez son las menos la que creen en esa caricatura del hombre perfecto.

Si nuestras mujeres antepasadas llevaban a cabo la obra maestra del amor eterno – léase eterno como “mientras los miembros de la pareja vivían” ¿Qué nos falta a nosotras? ¡Paciencia! ¡Paciencia! – imagino que dirá algún que otro “abuelito” pero yo creo que más que faltar nos sobra; y no me refiero a la paciencia sino a la voluntad de decir BASTA.

Si bien es cierto que muchas mujeres aun no estan listas para poner el grito en el cielo, las maletas en la puerta, y los limites en sus vidas; otras tantas de nuevas generaciones, con posibilidades de estudio, herramientas de vida, y conocimiento personal ya no permiten las mismas situaciones que antes – las de ayer – “vivían con naturalidad”. Hace unos días una participante en un entrenamiento vivencial que estaba impartiéndome dijo: “Es infiel porque es trailero”. Cómo si entre la profesión y la infidelidad existiera una conexión lógica y natural.

Tal vez el amor truena más cruento en estos tiempos porque las mujeres hemos ganado batallas que han permitido romper creencias obsoletas y rediseñar nuevas interpretaciones respecto de lo que es “ser mujer-ser pareja-y el amor”.

Aunque sigamos en un contexto crucial en relación a la violencia de género, los movimientos de apoyo, los instrumentos legales, las voces unidas de todas, genere día con día un levantamiento de liberación contra la opresión del pensamiento masculino.

Hemos aprendido ha decir “No” cuando queremos decirlo, pues sabemos que de lo contrario nos decimos “No” a nosotras mimas; que el amor principal es el que podemos proporcionarnos a nosotras , que es válido disfrutar de la sexualidad, que tenemos derechos de tener nuestros espacios personales, que no somos la pertenencia de nadie, que valemos; que ese valor es adjudicado por nuestro ser; que podemos estar solas –simplemente elegimos compartir con una pareja-; que no requerimos de nadie que nos venga a rescatar de ningún hoyo; que en nuestras manos están todas las herramientas, que un clavo saca a otro clavo – que la única persona imprescindible soy yo – qué podemos volver a empezar todas las veces que queramos.

Hoy las relaciones son más susceptibles, porque uno de los miembros de la pareja, se ha despertado. Sé que no sucede en todos los casos; pero sucede en muchos.

La honestidad emocional es una bomba que en las parejas se sucede con franqueza. Las mentiras, las traiciones, las infidelidades, el maltrato, la humillación, no son monedas corrientes que pasan inadvertidas.

Las mujeres ya no quieren saber de eso; y cuando sucede, lo dicen. Comenten lo que les pasa; se explayan, buscan nuevos acuerdos, fortalecen pactos, pero ya no están ciegas-sordas-mudas.

Quizás suene muy utópico mi artículo; no somos todos; pero somos muchas las que hemos y estamos despiertas. Apoyémonos y juntemos fuerza para seguir despertando a las que están dormidas. Todas juntas son mejores. Todas juntas podemos cambiar la educación de los niños de hoy para que sean grandes hombres de mañana.




12 de diciembre de 2022

Un cuento de navidad

Hace mucho tiempo, en un pequeño pueblo del sur de Noruega, dónde abundan los pinos y abetos, cada llegada del invierno era la bienvenida de una epidemia que la ciencia de la época no sabía cómo tratar.

Los bosques se vestían de oscuridad y nieve, el viento bravío se instalaba indiferente como un dolor de espalda y el sol desancoraba sus tentáculos del mar celestial en forma prematura.

Los nativos desde comienzo de la temporada comenzaban a enfermar, los primeros síntomas eran asignados a las bajas temperaturas y al enfriamiento de los pies, que aunque protegidos por gruesas botas, siempre lograban, al menos humedecer uno o dos  dedos y dejarlos congelados. Es que en cierta forma, los pies siempre estaban más que expuestos. La costumbre de quitarse el calzado al ingresar a cualquier casa para evitar que la nieve derretida ensucie; era un signo de solidaridad y fraternidad en la comuna. 

Pero más allá de los estornudos, dolores de garganta, toses en todas las escalas; advenían otros factores como el cansancio crónico, la tristeza anónima y el aislamiento.

Los senderos reservados al esquí o patinaje, se volvían con el paso de los días menos populares, y la gente caminando sobre el hielo se hacía menos frecuente.

Las altas cumbres de los alrededores parecían  reyes guardianes de la nada; coronados por glaciares silenciosos.

La hospitalidad del verano junto con los paseos, después de la comida, por los lagos azules y parques repletos de ardillas,  se esfumaba.

Muchos pensaban que tal vez, algún conjuro había caído sobre la población;  la naturaleza había sido tan absurdamente gentil con ellos, que quizás  la envidia había comenzado a cobrarse sus carencias.

Poco a poco, uno a uno, todos se enfermaban, algún más otro menos, pero nadie estaba inmunizado al misterio del invierno.

En aquella oportunidad, un médico que viajaba documentando rarezas y costumbres de distintos lugares, se albergó durante algunas noches en un hostal de la zona.

-          -Buenas Noches, bienvenido a nuestro refugio, ¿Sr…? –Preguntó con gran amabilidad el Sr. Arne, dueño del hospedaje.

-          -Oh!..qué tal amigo, gracias, muchas gracias – Respondió el Dr. Pentti ; mientras con esfuerzo se desenredaba la bufanda, aflojaba las botas y seguía respirando.

-          -Es un gran placer tenerlo con nosotros, quiere cenar además de la habitación –Indagó Arne, sosteniendo al doctor de un brazo para agilizarle el trámite.

-          -Seguramente eso estaría muy bien, tengo el apetito hambriento – Riéndose a las carcajadas de su mal humor, exclamó el viejo.

-          -Tenemos Rackfisch y sopas Sr.-

-         - Mmmm, delicioso… acepto; esa trucha fermentada – Dijo el Doctor estallando otra vez en carcajadas.

-          -Usted, ¿Sr…?-

-          -Doctor Pentti-

-          -Ah, muy bien, Usted Doctor Pentti, tiene un excelente humor, ya necesitaríamos por aquí que nos contagiara – Confesó Arne con gestos abrumados

-          -Porqué dice eso querido…¿ Arne, verdad? – Preguntó el doctor, acercándose al gafete de metal que su interlocutor  lucía en el  pecho del  lado izquierdo, al tanto que se sacaba los lentes empañados para limpiarlos  con un pañuelo de seda.

-          -Sí! Arne, es mi nombre-

-          -Muy bien, hijo, ¿por qué dices eso? Insistió el visitante con el rostro reflexivo.

-          -Sucede que al llegar esta estación nada es como era antes, los vecinos enferman, los remedios no curan,  todo se puebla de soledad. Se cierran las tiendas, las escuelas, los domingos de vino y cerveza que eran entre amigos, se dejan para otros meses. Todo se torna extremadamente melancólico y nostálgico.

-          -Pero ¿alguien ha sabido dar respuesta a todo esto?

-          -Nadie. Le sirvo un poco más de Rack…-

-          -Por supuesto- interrumpió Pentti relamiendo su bigote como lo haría cualquier gato después de tomar leche. Y Prosiguió: -  Tiene que haber alguna razón para todo este cambio, Arne; yo que vengo vagando por todo el mundo, he conocido muchas ciudades y costumbres extravagantes, pero nunca una dolencia como la que Usted me comenta.

-          -Pero, Usted, es médico, verdad?.-

-          -Si, así es, así es…-

-          .Entonces Usted que es un gran  conocedor, puede ayudarnos a develar el embrujo que tenemos.-

-          -No, no, no. No creo que se trate de situaciones como esas, para nada, estoy confiado de que podemos encontrar una causa lógica a tanto malestar. Ahora me iré a descansar y mañana veremos Arne, veremos que podemos hacer.-

-          -Gracias, Dr. Pentti.-

El Dr. Pentti dedicó varias horas a discernir sobre la problemática de la comarca. Y para  pensar mejor decidió dejarse adentrar por un sendero que llevaba a los verdes profundos del boscaje. Caminó durante un largo rato. Sus ojos se extasiaban frente a tanta belleza  y serenidad.  El paisaje parecía pintado por la paleta de colores de un artista del renacimiento, el cortejo florístico pobre esgrimía álamos, serbales, helechos y musgos. De pronto el latido de su corazón lo regresó a la realidad. Era tan penetrante el silencio que hasta juraría que podía llegar a ensordecerle. Y entre un inhalación entrecortada sintió la presencia de Dios inmaculada y soberbia. Magna. Espiritual. ¿Cómo no habría de pensar en Dios pese a su ciencia? Si ese recóndito espacio de perfección devenía de su mano.

¿Dónde estarían los animales? Todo eso parecía abandonado. Tal vez la frondosa vegetación esclava a sus raíces no podía emigrar; pero tal vez de poder no estarían.

¿Qué llevaba a los osos, a los zorros, al lobo o a la comadreja a huir o esconderse? ¿De qué huían los hombres, las mujeres, los niños? ¿Qué añoraban? ¿Qué significado tenía la añoranza?

De repente un absurdo vuelo loco de una gaviota equivocada volando al ras del lago entumecido lo mareó, el susto cegó su vista por un instante y al recuperarla reveló la incertidumbre.

-          -Luz, luz, luz! – Gritó eufórico

Y reparó que frente a él, un imponente pino lo miraba serio.

-          -Estrellas!, Estrellas!, Luz, Luz – Continuó gritando

Cuenta la leyenda, que el Dr. Pentti mandó a talar pinos, para que todos los pueblerinos los colocaran en sus casas y los adornaran con luces, estrellas, ángeles, esferas y guirnaldas. Y así fue como nació el árbol de navidad, inspirado en un loco buscador que encontró su propia guía interior preocupado por ayudar a sus prójimos.

Se dice que desde ese año la tristeza nunca más hizo nido en el lugar, todos al llegar el invierno decoraban sus casas con coronas de pinos en la puerta, candiles, y cadenas de luces. Los pinos recordaban el milagro de la vida,  seguridad y confianza y las luces, el calor y el maestro  interno que todos tenemos.

Para no perder la luz siempre hay que apoyar a quienes lo necesitan – expresó el Dr. Pentti antes de marcharse.

 


 

 

 

 

 

 

3 de diciembre de 2022

Más tiempo para hacer menos cosas

 Me he dado cuenta, que a medida que transcurren los días hacemos menos cosas. Queremos más tiempo, la fantasía del día de 48 horas, sin tomar conciencia que como humanidad nos hemos subido a un carrusel de feroz velocidad que nos impulsa a la producción artificial de nuestra propia existencia.

Con un ritmo alocado, vertiginoso, montados en la urgencia de lo que menos importa, nos dejamos ir como si el reloj no marcase las horas.

Más tiempo!, más tiempo!, más tiempo! ¿Para qué? Para dejar de hacer cosas. 

Quiero que me comprendas, porque adrede no me estoy explicando, "fabricamos cosas para hacer" pero dejamos "de hacer cosas importantes".

El tiempo ahora es de video que expresan en segundos la intención porque el minuto es un siglo y nadie tiene paciencia para eso.

Es la era de los telegramas de Twitter, de los "hechos" de Instagram, de los consejos compulsivos de los anuncios publicitarios, de los retos gratuitos que te informan de lo que no sabes -que ya eres consciente- y te cobran por mostrarte la llave de tu éxito y te recriminan tu "amor por el fracaso" sino tienes U$$100 para comprar la solución en el momento.

Es la furia proyectada de miles que creen que tienen algo que decir "sobre los otros" y dueños de una verdad inexistente te venden "la triste realidad de tu fracaso personal fuente de inspiración en tu falta de agallas." 

Es la muerte del escritor y el nacimiento del copy de contenido. Sin juegos amatorios. Tres líneas para tironear tu atención y "amonos!."

Es el período de la infancia grotesca con muecas y estrellitas de colores, ofreciendo variedad y servicios.

Reels, memes, frases que se imponen "Como cuando"....

Es la hora de la pérdida de voluntad.

Pasa el tiempo y lo que había alcanzado su sabiduría se extravía en el surgimiento infantil y adolescente de un comunicación que no comunica, imparte información vacía, promete falsas realidades, culpa, domina y castiga. Y el que no se sube a esta montaña rusa de NADA, pierde. 

Y así vamos perdiendo.

Ya no hay tiempo para escribir largo y tendido, faltan lectores que junto a una taza de té o café sonrían detrás de una pantalla.

Ya no hay tiempo para pensar y respirar profundo, falta silencio hay demasiado ruido interior.

Ya no hay tiempo para caminar, reír sin motivo, faltan cómplices.

Ya no hay lo que había. Ni habrá lo que hay, todo está pasando demasiado rápido.

A media que nos vamos volviendo "tecno", no vamos perdiendo y alejando de lo humano.

Brindo por los escritores que escriben para ser leídos y por los 2 0 3 que me regalaran vida al leer este texto.

Gracias por eso!

Namasté


 

28 de noviembre de 2022

Ho´oponopono



¿Has escuchado alguna vez hablar de Ho’oponopono? Refiere a una tradición hawaiana de resolución de conflictos que en la actualidad se practica como un arte de auto identidad para borrar memorias dolorosas. 
Las memorias son información que recibimos del inconsciente colectivo de la humanidad, de la sociedad en la que nacimos, del género al que pertenecemos, y del árbol familiar. 
Todas aquellas situaciones que todos estos han vivido y resultado frustrante, temerosas, o han puesto en riesgo su vida son heredadas como recursos de supervivencia, es decir, para mantenernos vivos; para que sepamos como actuar, que hacer, que omitir. 
Las memorias son el bagaje de nuestra mente subconsciente que es la que comanda la vida tal cual observamos a través de los ojos del cuerpo y de la mente racional.

Tienen emociones que a menudo generan boicot en nuestros sueños, postergación, conflictos en las relaciones amorosas. Los principales sentimientos que portan son el miedo y el no merecimiento que se presentan en la realidad a través de situaciones que se repiten una y otra vez, una y otra vez. Pensamientos recurrentes, experiencias que regresan desde el pasado con más fuerza. Entiendes de lo que hablo, ¿verdad? ¿Cuáles son esas situaciones que en tu vida van, vienen, y se quedan? ¿Problemas de sobrepeso? ¿Mala suerte en el amor? ¿Inestabilidad económica? ¿Enfermedades? ¿Pésima relación con tus padres? O ¿Tus hijos? O ¿Tus suegros? 

¿Te das cuenta que cuando se presentan los “problemas” siempre estás presente? ¿Qué querrá decir eso? ¿Casualidad? O ¿Mensaje? 
Si haces una lista de lo que te conflictúa, y la lees a conciencia, descubrirás que siempre es lo mismo lo que te desestabiliza, que cambia de escenarios y personajes, pero siempre es el mismo tema. 

Puede que sea escasez y lo vivencias como “en el trabajo no me dan el lugar que me corresponde” “mi pareja no me dedica tiempo” “cuando tengo dinero me lo gasto enseguida” “ La dieta no me funciona” “Mis hijos nunca me hacen caso de lo que les digo” “ Siempre me toca lo que mis hermanos no hacen” Lee bien parecen diferentes cosas, y sin embargo, es la misma con diferente caras. 
Esta experiencia de “escasez” habla de que tienes una memoria, que no importa de dónde viene, si es de tu infancia, tu gestación, tu concepción, herencia ancestral o cualquier otra; lo que interesa es que esa memoria tiñe tu realidad con su perfume de “falta algo” “me resulta insuficiente” “soy insuficiente” “no puedo” “no tengo” y te lleva a vivir en la dimensión de lo emocional: sufrimiento, miedo, inseguridad.

 Si observas lo que se repite, como carrusel, es una memoria, que se viste de mensajero para notificarte “por aquí no quieres seguir el camino”. 

Escúchala. Y en lugar de resistirla o negarla, abrázala ¿Cómo? Hay muchas técnicas para ello, hoy vamos a dejarte las cuatro palabras maravillosas de uno de los tantos recursos de ho'oponopono auto-identidad: Perdóname por favor, lo siento, gracias, te amo

Esas palabras son de alta frecuencia energética y te llevaran con la sola repetición, constante y continua a un estado de paz.  Las puedes decir en ese orden, o en otro, incluso puedes escoger solo alguna de ellas y no recitar las 4. Son como mantras que, al decirlos renuncias al espacio y tiempo, por lo que llevas a tu mente a un estado de presente absoluto, donde aquellas sensaciones incomodas no tienen cabidas. Cuando llegue algo que te resulte doloroso, cuando veas en la calle algo que te inquiete, practica este mantra, y hallarás una profunda plenitud.

Recuerda que la practica hace al maestro. Puedes practicarlo en cualquier ocasión. Con el tiempo verás que las cosas han cambiado, porque tu ya no eres la misma.

Chuchi Gonzalez



14 de noviembre de 2022

10 cosas que nunca debes decirles a tus padres

"Cuando los hijos se convierten en jueces se sus padres,
 la vida se convierte en verdugos de esos hijos"

Si quieres vivir plena y feliz, deberás tomar la decisión de ser una mujer libre, y cuando digo LIBRE me refiero a todas las áreas de tu vida. Hablo del desapego, de soltar la aprobación o la necesidad de reconocimiento de las personas.

 De dejar de hacer, decir y actuar para quedar bien con los otros, para ser querida, o admira.

De las primeras personas que debes aprender a desapegarte es de tus padres.

Mamá y papá siempre estarán ahí recordándote que eres su niña; algunos con sobre exigencias, otros con sobreprotección, y en algún punto cualquiera de esas dos conductas son invasivas y tóxicas; por lo que tendrás que reeducar la relación con ellos para que haya respeto de ti hacia quienes te dieron el legado de la vida, un privilegio maravilloso y de ellos para entender que eres su hija pero ya dejaste de ser su niñita.

ATENCIÓN Y PON LÍMITES

Si quieres entonces convertirte en una mujer hecha y derecha NUNCA debes decirles a tus padres: 

  1. SI cuando quieres decir NO 
  2. Hacer una encuesta sobre asuntos privados de tu vida. ¿Me caso? ¿Me divorcio? ¿Cambio de empleo? Ellos responderán desde sus creencias, y tú vives la vida desde las tuyas, por lo tanto hazte cargo de tus propias decisiones. Una cosa es comentar y esperar un opinión, otra es recurrir a ellos para que te “digan lo que TIENES QUE hacer."
  3. Mentirles acerca de tus preferencias, ellos quieren lo mejor para ti, pero siempre eres la persona que debe elegir sobre su vida. 
  4.  Reclamarles por lo que no tienes; eso te coloca en el papel de una niña inmadura, ellos con sus aciertos y errores siempre actuaron en relación a sus posibilidades, aun cuando no haya sido satisfactorio para ti. 
  5. Que tus suegros o los padres de tu pareja son mejores que ellos. Las personas son simplemente diferentes. Las comparaciones odiosas.
  6. Que todo está bien cuando todo está mal. No es bueno vender la imagen ideal porque te engañas, engañas a otros y te quitas la posibilidad de que te apoyen.
  7.  No pedí nacer, hay muchas teorías que corroboran que nuestro nacimiento no es resultado del acto sexual, sino de una inteligencia inconsciente familiar, que si nacemos es para cumplir una misión en nuestra familia, y que escogemos a los padres. Que ellos son las personas que nos ayudaran a trascender las experiencias que vinimos a fortalecer en este plano. Pero si nada de esto te convence, tampoco lo digas. Porque aun cuando conscientemente no hayas pedido nacer, estás acá y la vida es una paseo maravilloso, poderoso, transformador y digno de ser vivido. Si estás vivo es una bendición.
  8. Quejarte por lo que no hicieron con sus vidas. Sé empática y mira lo que estás haciendo con la tuya. ¿Tienes la vida añorada? Si la respuesta es NO ¿Entonces con qué derechos señalas la paja en el ojo ajeno? Si la respuesta es SI, seguramente nunca ha pasado por tu cabeza indagar a tus padres por lo que no fueron capaces o no quisieron hacer.
  9.  Que no vas a perdonarlos. El perdón no es un beneficio para ellos. Es una  declaración personal de liberación. El dolor del pasado está ahí. SUELTALO.
  10. Que los amas porque son tus padres. No los ames por una etiqueta, ¿Si no fuesen tus padres igual los amarías? Ámalos porque sientes el amor hacia ellos correr por tus venas. El amor es una libertad. No una obligación.

        




sI




13 de noviembre de 2022

¿Fabricar o crear? ¿Es lo mismo?

A la hora de tener relaciones ¿creas o fabricas? Quizás puede parecerte sinónimos o una pregunta un poco ventajosa, lo cierto es que entre ambas palabras hay un abismo de efectos muy diferentes.

Cuando fabricamos relaciones, debes saber que NUNCA son sanas, dado que son vínculo generados desde la carencia o necesidad, más propiamente desde el miedo. ¿Miedo? Si, miedo a estar solas, a no ser madres, a no tener pareja, a envejecer, a ser rechazada, al abandono. Es cuando buscamos afuera lo que no encontramos dentro de nosotras mismas y por lo tanto nos jugamos al mejor postor.

 En estos casos “fabricamos” aquellos que creemos necesitar y por lo tanto, nos disponemos a pagar altos precios emocionales.

En estas circunstancias, tenemos un escenario emocional de dependencia, jerarquía, temor, en la que somos capaces de aceptar cosas en contra de nuestros valores o principios con tal de obtener eso que anhelamos: compañía, sexo, seguridad, amor, comprensión, status, matrimonio, “armonía”; alegría. Aunque nos llevemos bien con ese otro, no son relaciones sanas, por cuanto nos auto sometemos a expensas de que la persona elegida y proveedora de eso que nos urge obtener no salga corriendo en la primera discusión. Y cuando negamos lo que somos, siempre terminamos sufriendo, nos encerramos en una cárcel de cristal llamada zona de confort, y el ser que somos agoniza.

Cuando en su lugar somos capaces de CREAR, es cuando nos compartimos con el otro y los otros desde un lugar de abundancia, de lo que verdaderamente somos, un espacio íntimo y sagrado de amor personal que se potencia al formar pareja. En este ámbito todo lo que creamos es saludable, es bueno para nosotras, y para el mundo. Llegar a esta capacidad implica estar dispuesta a renunciar a muchas cosas que al principio parece como imposible, puesto que estamos acostumbradas a actuar en contrario.

TIPS PARA CREAR UNA RELACION SANA

1)    Renuncia a la idea de que en el exterior está la causa de tu felicidad. Si no eres capaz de renunciar a esta creencia errónea NUNCA PODRÁS CREAR, siempre serás la sierva de las fabricaciones de otro. Tu felicidad está en tu interior, lo has escuchado mil veces, pero insistes en creer que si haces una dieta, si tiene un empleo, o si tu pareja te presta más atención, serás inmensamente feliz, es una fantasía, solo puedes ser feliz si en tu interior te das el permiso de serlo. La felicidad es tu patrimonio y tu responsabilidad.

2)     Asume la responsabilidad de tu vida, no dejes en manos de las otras personas lo que te compete a ti. No compres la idea de que tus hijos, tu pareja, tus padres o la vida deben darte, nadie te debe nada. Tu tienes que tomar la vida en tus manos y guiarte con el corazón. Responsabilizarte es hacerte cargo de tus elecciones. Si alguna vez te has equivocado, practica borrón y cuenta nueva.

3)   Perdona tus errores, no los tengas en mente todo el tiempo, porque lo único que haces es castigarte. Vives en el autocastigo como una forma de purgar viejas cuentas, errores que nadie recuerda más que tu. Y sigues haciendo eso, vives el presente en un tiempo inexistente que es el pasado. Sea lo que sea que hayas hecho perdónate, incluso cuando creas que es terrible, perdónate. Castigarte no borra el pasado, pero si condena tu presente.  

     No supongas, no des por hecho lo que el otro o los otros piensan, cuando lo haces se genera un vicio o un ruido en la conversación y en estos casos siempre alguien es víctima y el otro victimario. Indaga sobre tu escucha, no presupongas, no quieras adivinar ni el pensamiento ni el accionar ni las emociones ajenas, ¡mejor si tienes esos poderes ponte una consulta adivinatoria!

4)     Suelta el papel de víctima, lo que te permitirá soltar las cosas que no funcionan, la vida a menudo no es tan justa como lo deseamos y aún así tiene una finalidad, aprende a vivir con eso sin sentirte víctima de la circunstancia porque aún con todo adverso tienes muchos motivos para sonreír.


 

12 de noviembre de 2022

RELACIONES SANTAS

 

  Te invito a que reflexiones por unos minutos!!!

¿Alguna vez has pensado por qué sufrimos tanto a lo largo de la vida? Quizás en este momento puedes sentir “No es tanto” porque tal vez ya pasó la fuente que activa tu padecimiento, pero cuando se activa otra vez, de nuevo saltas a la acción de la desesperanza, de la injusticia, del reproche.

Has pensado ¿Por qué a mí? Y has justificado “Yo he sido buena, honesta, trabajadora, solidaria” y así vives en un sinfín de preguntas y excusas para poder comprender porque las cosas salen mal.

Lo cierto es que todos los seres humanos sufrimos porque nuestro EGO nos ha enseñado a eso, a partir de su más impresionante creación: LA DEPENDENCIA.

Todos somos dependientes. En mayor o menor medida, pero lo somos. Dependes tal vez de una pareja, o de la necesidad de no tenerla para no meterte en problemas, de un trabajo, de un salario, o de una dieta, de un estilo de vida, de un consejo, del sexo, de tu familia de origen, de tus hijos, del título que tienes enmarcado, de tu imagen, de la opinión que los otros expresen hacia ti, de tus amantes, de la comida, de Netflix, del tabaco, del alcohol, de comprar por Amazon, no importa lo que sea, pero estamos “Pendiendo” colgados de algo.

Un algo que según nuestra cabeza nos hace mejor, nos pone felices, nos desestresa, nos da endorfinas, nos presta calma, nos entretiene, despeja, alimenta, balancea, enriquece, alivia, enorgullece, beneficia.

No importa lo que es, lo que es interesante es comprender que cuando le damos esa categoría a algo que está fuera de nosotros, es cuando perdimos el juego.

Aquello que nos provee “bienestar” algún día no estará más. Se rompe, se desgasta, se va, se asfixia.

La vida tiene eso de que todo lo que obtenemos, un día se pierde.

Es su ley. No puedes contra ello.

Y cuando la ley se cumple, aparece el sufrimiento.

Si aprendemos a soltar la magia que el exterior nos representa, si pudiéramos entender que nada depende de afuera, sino siempre todo es adentro; podemos tener preferencias, pero no dependencia.

Son dos cosas diferentes.

Puedes preferir tener una cena íntima con tu pareja, pero si tu pareja está con trabajo no te mortifica.


Puedes preferir ver una película en las noches, pero si se corta la luz no armas un escándalo.

Puedes preferir que tus hijos pongan la mesa, pero si no lo hacen no te enojas.

Puedes preferir pasar el tiempo con tus padres, pero si ellos quieren hacer otra cosa no te sientes rechazada.

Puedes preferir hacer una dieta saludable, pero si la rompes porque tienes un evento no te castigas.

Puedes preferir hacer ejercicio, pero si un día no lo haces no te obsesionas.

Se trata de aprender a disfrutar la vida sin buscar “quedar bien con la vida”

De saborearla en toda su expresión, en lugar de morderla a pedacitos miserables.

Sólo así podremos tener una vida con relaciones santas.

Relaciones Santas es un término acuñado de UCDM (Un curso de Milagros) y significa "Santo" completo. 

Es decir, RELACIONES COMPLETAS. 

¿Te atreves?



 

8 de noviembre de 2022

Mis ancestras ¿Quiénes son? ¿Qué aportan en mi vida?

 Mis ancestras, parece lejano. Sin embargo, están en mí, corren sus historias por mi sangre, por mi conciencia, por mi ADN.

Mis ancestras son mi madre, mis abuelas, mis bisabuelas, y sus colaterales, sus hermanas, primas. Son tres generaciones que me informan y me forman con su herencia.

Mis ancestras son ellas en mi.

Parece mentira o mágico, no obstante, es cierto. ¿Cuántas historias de tu madre repites? ¿Cuántas de tus abuelas? ¿De tus bisabuelas? ¿De tus tías?.

Quizás no lo veas porque crees en la farsa de lo igual, más lo mismo pero al contrario forma parte del mismo plan.

Todo aquello que hagas en polo opuesto a tus chicas antecesoras es lo mismo en otro grado de vibración.

Nuestras mujeres nos han enviado una información para salvarnos de vivir más estrés. Quizás sus métodos, generen malestar, pero esa no era la consigna. 

Nos aman y quieren "protegernos," incluso cuando eso sea en detrimento de nuestros sueños.

¿Qué patrones repites de tu madre? Mamá es la primer fuente de tus patrones repetitivos. 

Mamá es la que te ha dado o negado el permiso a ser abundante y a relacionarte en la vida de pareja.

Lo que mamá creyó y vivió en su vínculo amoroso, será tu primer legado en relación al amor de pareja. 

¿Cómo era la relación de mamá y papá? ¿Cómo son las tuyas? ¿Qué tienen en común? 

Mamá, nos enseña a la posibilidad de creer en nosotras mismas y en el encuentro con el otro. Ella es la pionera en nuestra autoestima, capacidad de amarnos y amar. 

Si mamy, no se ama, ¿adivina?, ella puede querer mostrarnos ejemplos, pero el único que tomaremos es el de ella. 

No sirve que má diga "NO SEAS COMO YO" porque no podemos ser otra cosa. 

Tal vez, pienses sí, pero seguramente ese conflicto lo vives en polaridad contraria. 

El árbol y el fruto están unidos.

El fruto no cae lejos del árbol. ¿Entiendes? 

Tus ancestras, son episodios de una temporada que te prepara para vivir tu actual misión de vida. Todos tenemos una misión espiritual personal y familiar. Y ambas son expuestas en el seno de la familia. 

Tus mujeres han vivido y recorrido un camino, y en tu vida, haces lo propio para las mujeres futuras. 

¿Cómo ha sido el camino que te dejaron? ¿Qué camino estás dejando?

Interiorizarte en estos pensamientos ayuda a tu árbol a seguir floreciendo. 

TRATAMIENTO FRASES SANADORAS 

X 21 DÍAS

Inclina tu cabeza hacia adelante, conecta con todas ellas.

Siente el amor. La energía. Y repite: 

Estoy aquí por ustedes. Quiero  agradecerles y reconocerlas en nombre del amor infinito que recorre nuestro ADN emocional. 💖

Agradezco que mejorarán mi camino y camino en contacto con la madre y el padre, en unión y comunión sagrada.

Gracias por la energía de vida que inyectaron en mi alma.

Honro vuestras vidas, viviendo con y en alegría la mía.

Gracias, gracias, gracias.

Incluso cuando parezcan palabras, tu subconsciente que no reconoce realidad de ficción, recibe esa liberación y agradecimiento como una realidad física y organiza los programas y archiva los que ya no requiere para protegerse. 

Si quieres saber sobre tu linaje, te invito a que te unas a mi programa SANA TU LINAJE 

 te dejo enlace con la información http://www.chuchigonzalez.com/p/cursos-online.html

Si quieres solicitar sesión personalizada para estudiar tu árbol puedes hacerlo por WhatsApp +525534551888